Apreciación del diseño para nuevas ciudades
El panorama futuro de las ciudades presentará cambios sutiles que se irán incorporando poco a poco, ante una realidad de interacción...
La contaminación por aguas residuales ha sido común a lo largo de la historia del desarrollo de las ciudades, en estos momentos la importancia de tomar acciones resalta. La exigencia de mejoras e innovaciones en los sistemas receptores es una prioridad que va más allá del cumplimiento de normativas para permisos constructivos.
Es un asunto de conciencia, no solo una tendencia, sino un compromiso a resolver cuanto antes, muy enlazado al panorama mundial actual. Un método simple que bien aplicado puede brindar varias ventajas a un complejo constructivo son las lagunas de estabilización para el tratamiento de aguas residuales..
Deben remover la materia orgánica presente en el agua, eliminar los microorganismos patógenos que pueden poner el peligro la salud comunitaria y lograr que el efluente sea adecuado para otros usos como riego .Como gran parte de la efectividad de este tipo de medidas en proyectos, su factibilidad está ligada a la zona climática, los suelos disponibles, los vientos y la radiación solar, pues son factores biológicos esenciales en el proceso natural de la recuperación de cierta porción del líquido.
Existen varios tipos de lagunas: aeróbicas, anaeróbicas, facultativas, de maduración, etc. Cada una tiene un ciclo distinto para la conversión y sedimentación de las biomasas presentes en el agua. A su vez, desde la etapa de planeamiento tanto su tipo como diseño; se definen según las posibilidades antes mencionadas y las intenciones de uso. Por supuesto, será muy necesario contemplar la capacidad de mantenimiento que se les pueda estar brindando.
En este caso en particular su funcionalidad también debe responder a la variante estética. Nadie desea ver una laguna sin elementos atractivos en medio del campo de un proyecto residencial. Si se piensa trabajar con una de ellas hay que tener en cuenta que debe convertirse en un foco visual positivo y enriquecedor para el sitio, nunca un elemento a esconder a toda costa.
Esta opción de tratamiento tiene un eje más depurativo en cuanto a proceso contaminante, pues los lodos y sedimentos, así como el agua misma tratada correctamente, pueden utilizarse en zonas verdes para riego y fertilización de suelos pobres; fortaleciendo así el espacio natural dentro del concepto completo de infraestructura urbana.
Consurbanes (Mariana Sáenz Mora)